La tarde del 5 de Junio en la Biblioteca Pública Municipal recibimos la visita de los chicos del Centro ocupacional y sus profesores. Comenzaron a llegar a las 15:30 y estuvieron hasta las 18:00 h. Era una visita organizada desde hacía semanas y con una serie de actividades y juegos preparados para ellos.
La Biblioteca municipal colabora habitualmente con el centro preparándoles actividades adecuadas a su capacidad.
En esta ocasión contamos con la ayuda de cuatro alumnas de Secundaria propuestas por el Instituto de educación secundaria “Fray Luís de León”. Estas alumnas participaron en todas las actividades organizadas para este evento.
En primer lugar los chicos del centro pudieron disfrutar de un cuentacuentos llamado kamishibai . El kamishibai es una forma de contar cuentos que se originó en Japón en el siglo XII. Su significado literal es “Teatro de papel”. Las voluntarias para realizarlo colaboraron de forma muy activa contestando a todas las preguntas de los chicos y también les ayudaron a continuación a pintar un dibujo relacionado con el cuento.
De forma simultánea al cuentacuentos y en otro espacio reservado de la Biblioteca se comenzaron a realizar las actividades preparadas para otro grupo. En primer lugar se comentaron las frases que decoran la biblioteca y entre todos se intentó formar una nueva, con una serie de palabras propuestas. A continuación jugamos a un original juego, en el que tenían que completar los títulos de los famosos cuentos clásicos. Estos títulos estaban incompletos porque les faltaban las vocales, de ahí su título “la bruja quitavocales”.
La siguiente actividad consistió en un bingo literario. Se les repartió un cartón a cada uno en el cual debían escribir nueve palabras que al leer el cuento las quitarían según fuesen apareciendo. Continuamos con un juego expuesto en la pared en el cual debían relacionar palabras uniendo con flechas.
Y para terminar, desde el centro prepararon una bandeja de “canapés literarios”. Cada canapé contenía una nota con una adivinanza. Cada uno de ellos fue leyendo la suya e intentando adivinarla ya que en tal caso se quedaban con el dulce premio.
Y ya en su despedida se entregó un diploma por la participación a cada uno de los asistentes, incluidas a nuestras chicas voluntarias agradeciendo su activa colaboración.